Goleada calenturienta

Por Tuy - 24 Junio 2008 | Categoría: Inflexiones


El fútbol me trae muy buenos recuerdos. Siempre que hay algún torneo consigo alguien que me haga el favorcito, solo por hacerme la que me interesa el tema, aunque eso de ver 22 hombres musculosos en pantaloneta me pone más calentona que de costumbre. Como todos hablan de la Eurocopa pues aprovecharé para llamar su atención, me coloco ansiosa si no tengo diez mil morbosos encima de mis escrituras llenas de analogías de penetraciones.

Como mi estrategia para que me hagan el favorcito de bajarme la calentura es hacerme la conocedora del tema, entonces cuando estamos "en eso" le digo : "papi, gambetéame" ... "méteme un penalty, eres mi Calimeño"… hmmm… ¡suspiro! Ya me coloqué cachonda, ¿no les digo?. También me recuerda a los momentos vividos con mi ex-novio en el mundial pasado cuando el muy vivo hacía de las suyas en los intermedios de cada partido, para luego seguir viéndolo.

Como en esta Eurocopa no he conseguido quien me haga la vuelta me coloqué a morbosearme a esos monos grandotes de Austria y Alemania, yo a uno de esos le daría hasta un hijo con tal de que me dieran la nacionalidad. Veía a Schweinsteiger, Ballack, Klose, Lehmann y Podolski, nombres que jamás lograré pronunciar pero que sí sé copiar de internet. Me senté en el sofá a imaginarme copulando con alguno de los "tanquecitos" Alemanes, pero mi emoción se hizo más intensa cuando Ballack se aprestaba a cobrar un tiro libre. Alemania jugaba con el anfitrión y el partido no estaba muy claro. Ballack fue imponente y lanzó un tiro soberbio, un balazo imparable que penetró con extrema energía en el arco Austriaco… lo de "penetró" y "extrema energía" fue una analogía pseudo erótica, revisen sus entrepiernas para ver si surtió efecto. El caso es que el gol de Ballack, papacito, me colocó ganosita en esos instantes… y procedí a llamar a mi amigo anular que me ayudó como en cámara lenta para tener una sensación orgásmica, mi cuerpo sediento por macho me traicionó y buscó la libertad de mis deseos personificados en lo que toda mujer como yo quisiera tener: un marido europeo.

Mi mente calenturienta hizo de las suyas y me imaginaba entre sus manos retenida, prisionera de sus brazos, doblegada, poséyeme papi: había sentido danzar en forma vertical en el centro de mi cuerpo sensaciones indefinibles. Fue extraño, ardía por dentro de pasión, mojada lo sentí conmigo, penetrada, subyugada, vencida… No es la primera vez que se enciende mi chispa ardiente, (de hecho hasta viendo al del minuto de Dios me pasa) porque cualquier machote en TV me coloca así. y cualquier pretexto es válido para imaginármelo "en esas". Así que en medio de tanta pierna varonil y atléticas figuras de los futbolistas, mi subconsciente es muy predecible y libidinoso. Amables lectores, ¿La pecosa les despierta pasiones?, ¿Cuál sería la final de la Eurocopa 2008? ¡Por favor, comenten que el fútbol me baja el tráfico! Si quieren me disfrazo de balón de fútbol.

Foto: I’m enjoying it de Xirannix / Flickr: licencia CC-BY

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